De los vocablos quechuas Runa=diablo, demonio, hombre; Mula=hibrido del burro en yegua, mujer.
Creencia que sataniza a una mujer casada que convive con un barón casado, cuya alma que a partir de la media noche de los martes o viernes, convertida el la mula, sale a galopar las calles montada por un jinete que con látigo en mano lo castiga despiadadamente hasta obligarle a lanzar llamaradas de fuego por la boca.
Existe la creencia que, la mujer que convivía en cura se convertía en mula, quien salía de casa de el, los viernes de la semana a las 12 de la noche para recorrer las calles, con su jinete parecido al diablo, “esta mula estaba enjaezada, con vellones de pluma fina, con tapujos adornados de oro, con rienda anillada de plata, freno reluciente oro, con montura de cuero fino y estribos plateados; sus cascos daban la impresión de tener herrajes , porque emitían ruido o tronaban sus pasos en los pedregales. El jinete endiablado, vestía con traje de luces, usaba espuelas de oro macizo, llevaba un látigo en la mano.
Se dice que durante el recorrido, cada vez que el jinete arremetía o hincaba las espuelas y daba de látigos a la “Runa Mula”, este aligeraba el paso, con requiebros, relinchando, echando chispas de candela por la boca, las narices y el trasero”
.(BARDALES RAMIREZ Floriano; monografía de la provincia de lamas p.57,1990.
Fuente: creencias supersticiones selváticas (Lamas-San Martín –Perú)
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viernes, 2 de octubre de 2009
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Este relato nos lo contaba nuestro abuelo cuando éramos niños, hace muchos años.
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